El sábado 31 de mayo se cerraron los actos de acción de gracias por la participación de la Cofradía en el Jubileo de las Cofradías en Roma.
Durante toda la semana Nuestro Padre Jesús Nazareno estuvo expuesto al culto en veneración extraordinaria en la Capilla de Santa Nonia, recibiendo la visita de infinidad de hermanos, devotos, leoneses y foráneos, agradecidos por que el Nazareno esté de vuelta en su casa.
En la jornada del sábado, la Capilla de Santa Nonia abrió sus puertas de forma ininterrumpida durante toda la mañana y la tarde, con una gran afluencia de hermanos y devotos que quisieron acercarse a orar ante Nuestro Titular y ante lo que la Iglesia se quedó pequeña.
A las 19.00 horas de la tarde del sábado, la Banda de Cornetas y Tambores y la Agrupación Musical ofrecieron un pequeño concierto. La Dolorosa o Réquiem por parte de la Banda de Cornetas y Tambores y Anima Christi o Jesús del Prendimiento por parte de la Agrupación Musical fueron algunas de las marchas interpretadas. El Abad pronunció un emotivo discurso en el que imaginaba como el Nazareno le habría contado a su Madre, La Dolorosa, lo que había vivido en Roma y como le habían acompañado todos los hermanos, incluso los que no pudieron participar en este singular acontecimiento.
A las 20.00 horas se celebró una Solemne Eucaristía, oficiada por Monseñor José Manuel del Río, Prelado de Honor del Vaticano, en cuya homilía animo a los hermanos de Jesús a participar en la misión evangelizadora y santificadora de la Iglesia: “Id por todo el Mundo. Haced discípulos de todos los pueblos”
Posteriormente se celebró un cóctel en la Casa de Carnicerías, con el que se puso el colofón a todos estos actos, quedando solo pendiente la convocatoria de la jornada de convivencia para la que se está buscando la fecha disponible más oportuna.